Kristel Köbrich es un ícono de la natación chilena y latinoamericana. En Resilientes Totales de 13C, la nadadora compartió los desafíos que enfrentó para profesionalizarse, las decisiones que marcaron su carrera y si continuará su participación en otros Juegos Olímpicos.

La nadadora chilena Kristel Köbrich, una de las máximas exponentes del deporte acuático en Chile y América Latina, compartió su inspiradora trayectoria en Resilientes Totales de 13 C. La deportista reflexionó sobre los momentos más desafiantes de su carrera.

Desde muy joven, la natación fue parte fundamental de su vida, influenciada por sus padres, ambos profesores de educación física, y sus hermanas. A los 11 o 12 años, debió elegir entre atletismo y natación, optando por esta última pese a que implicaba un compromiso diario.

“La natación me ha dado una elección de vida”, aseguró Kristel Köbrich en el programa conducido por la periodista Trinidad Carvajal mientras recorrió el centro acuático que hoy lleva su nombre en el Estadio Nacional. La máxima exponente de la natación chilena también repasó las dificultades que enfrentó en su carrera profesional y los logros que ha conseguido con el paso de los años.

Profesionalizar su carrera en Chile no fue fácil. “Entiendo que fui una pionera en un deporte totalmente amateur”, reconoció Köbrich al recordar sus inicios en la natación. “A los 15 o 16 años veía a mis rivales internacionales con rutinas de doble turno antes de ir al colegio y me preguntaba: ‘¿Cómo no me van a ganar si yo no estoy haciendo lo mismo?’ ‘¿Cómo voy a entender mi propia realidad si no estoy haciendo lo necesario para seguir evolucionando, sabiendo que todavía tengo energía y quizás un potencial escondido mucho más profundo?’”.

Más allá de los resultados, confesó la nadadora, lo que realmente le inquietaba era la idea de no estar haciendo lo mismo a lo que hacían sus competidoras. Por ende, decisión de dar un paso más allá y conseguir un buen entrenador. Así llegó hasta el argentino Daniel Gabardi, quien le ayudó en su carrera. “Lo conocí porque una de mis rivales entrenaba con él. Era de Córdoba, y me ganaba, y me ganaba, y me sacaba… Y yo decía: “Pero para ¿cómo tanto?” Y dije: “No.” El Dani es un especialista en ese tipo de nadadoras, de fondo, de largas distancias. Entonces lo aproveché y le dije: “Ok, necesito que me esperes para yo poder ir”, reveló Kobrich. 

Después tomó una decisión radical a los 18 años: irse a vivir a Córdoba, Argentina, para entrenar con él. Esa decisión le cambió la vida y le dio la oportunidad de dedicarse totalmente a su deporte. “”Porque yo dejé muy claro, yo quiero hacer esto, voy para esto y vamos a ver qué sale. Pero es mi historia, mi elección y mi natación", afirmó sobre su decisión de vivir en otro país para seguir sus sueños y aseguró que no tuvo problemas con su familia al respecto: “Fui muy clara. No le di lugar a que las dudas de otros me afectaran. Sabía lo que quería”.

Kristel Köbrich repasa su historia en los Juegos Olímpicos 

La nadadora chilena inició su carrera en pruebas de piscina, para luego incursionar también en las exigentes competencias de aguas abiertas. Con una trayectoria excepcional, Kristel Köbrich se ha convertido en la deportista con más participaciones en campeonatos mundiales de natación, sumando 12 mundiales. Ha cosechado 5 medallas en Juegos Panamericanos, 18 en Juegos Suramericanos, ha sido dos veces la cuarta mejor nadadora del mundo en los 1500 metros libres y ha logrado seis clasificaciones olímpicas, un hito inédito para el deporte chileno.

Su debut olímpico fue en Atenas 2004, pero uno de los momentos más duros de su carrera ocurrió en los Juegos de Beijing 2008, donde compitió en la prueba de aguas abiertas de 10 kilómetros. “Tomé una pésima decisión, estratégicamente muy mal. No era lo que yo quería. No me abastecí, no paré donde tenía que tomar líquido. Hacía mucho calor, la temperatura estaba muy fuerte, muy intensa… Me descompensé y no pude terminar”, recordó Kobrich cuando tuvo que competir en una maratón de 10 kilómetros en aguas abiertas que no logró terminar.

El episodio fue más complejo de lo que se vio desde fuera: “Tuve un ataque taquicárdico. No podía más, estaba muy, muy mal. Fue una experiencia dura, tanto física como mentalmente. Venía bien, en las Copas del Mundo estaba en el pelotón, pero a veces uno cree que puede con todo y el cuerpo te dice que no. Y eso me pasó la cuenta. Igual, hay cosas que no recuerdo…”, confesó.

Pese a ello, Köbrich ha sido una constante presencia en la natación olímpica, y ha representado a Chile en cinco ediciones de los Juegos Olímpicos. En Londres 2012 obtuvo el 24° lugar en los 400 metros libres y el 14º en los 800 metros. Cuatro años más tarde, en Río 2016, repitió en ambas pruebas y finalizó 24° en los 400 metros y 17° en los 800 metros.

En Tokio 2020, Kristel Köbrich compitió en las pruebas de 1500 y 800 metros libres, aunque no logró avanzar a las finales. Sin embargo, en los Juegos Olímpicos de París 2024 alcanzó sus mejores resultados recientes: 14° lugar en los 1500 metros y 15° en los 800 metros, marcando un nuevo récord en su carrera. Con estas actuaciones, consolidó su posición como una de las atletas más constantes y emblemáticas del deporte chileno. Incluso, se rumoreó que estos Juegos en Francia podrían ser los últimos de su trayectoria.

En este sentido, Kristel Köbrich se refirió a esas especulaciones: “Entiendo el calendario, que son cada cuatro años, y que está esa presión. Pero los Juegos no van a dejar de hacerse porque yo esté o no esté”.

“Entonces, es mi decisión, mi responsabilidad y mi compromiso, porque yo sigo representando a Chile. No es mi nombre, solamente, está Chile. Hay una bandera, hay colores, y a eso le tengo muchísimo respeto”, comentó la nadadora y aseguró que al menos en las competencias olímpicas “hay Kristel para rato”. 

Más allá del futuro de su carrera, Kristel Köbrich señaló que la natación, pese a ser un deporte solitario, le da tranquilidad y es algo que ama practicar. “Es mi lugar de paz. Esa burbuja me acoge”, declaró.