La poco recordada confesión de Cristián Castro en Sábado Gigante sobre crecer como “el hijo de Verónica Castro”

Con apenas 22 años, Cristián Castro ya había lanzado cinco álbumes y era uno de los artistas latinos más populares del momento.

Sin embargo, cuando visitó el set de “Sábado Gigante” en 1997, el cantante mexicano aún cargaba con el peso de un apellido famoso y de la constante comparación con su madre, la icónica actriz y cantante Verónica Castro.

En conversación con Don Francisco, el intérprete de “Azúl” se sinceró sobre su trayectoria: “He crecido junto con mi madre. Estuve en su novela desde los cinco años, ‘El Derecho de Nacer’. Pero nunca pude dedicarme por completo hasta ahora”. 

A lo largo de la entrevista, el artista dejó entrever que, aunque agradecido, también estaba decidido a escribir su propia historia.

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La confesión de Cristián Castro en “Sábado Gigante”

“Muchas veces hay que luchar mucho desde los maestros en la escuela. Como que te ponen el ojo así: ‘Este niño tiene problemas, es el hijo de Verónica Castro’”, confesó en aquella ocasión. 

Con humildad y sentido del humor, Cristián Castro reconoció que le costó convencer a la gente de que su carrera no era un mero impulso mediático: “Es difícil que la gente te crea, que no eres una mentira”.

En esos años, también exploraba su pasión por el cine. Había dirigido varios cortometrajes, uno de ellos protagonizado por su madre, quien, según contó entre risas, tuvo que actuar en inglés: “No es su fuerte, en realidad, pero le echó muchas ganas. Le cuesta hacer de mujer dura, como una policía, pero lo sacó muy bien”.

Años más tarde, Cristián Castro se consolidaría como una de las voces más queridas de la música romántica en español. Pero en 1997, en plena juventud, aún tenía que demostrar que su talento era auténtico.