Claudia Schmitd habla de todo, aborda polémica con Adriana Barrientos y su salida de ZDE: "No tengo nada que perdonar"
La modelo y opinóloga Claudia Schmitd conversó con Alfombra Roja para analizar más relajada y sin filtro su renuncia a la televisión, lo que quiere en su futuro y hasta dio su sincera opinión sobre las últimas polémicas faranduleras.
Desde que apareció en las pasarelas chilenas a fines de los años '90, la modelo uruguaya Claudia Schmitd dio que hablar por su singular estilo y llamativa figura. Sus ojos claros y rubio cabello no pasaron inadvertidos para nadie, pero también empezó a llegar a lugares donde notaron que en ella había algo más que ser la chica de moda.
De a poco, la rubia, que había inmigrado para trabajar con los más reconocidos diseñadores, dio qué hablar tras incursionar en la animación de programas y convertirse en una respetada opinóloga, ya que su carácter y forma de decir las cosas la hicieron conocida como una de las mujeres más incisivas de la farándula nacional.
Tras lucirse y renunciar a su rol como panelista de "Zona de Estrellas", en Zona Latina, Claudia se sentó a responder las preguntas de Alfombra Roja. Ya más relajada, y desde Miami, Estados Unidos, donde se encuentra ahora con sus hijos y pareja, la exchica Morandé analizó sus últimos años en el medio televisivo, se mostró sin caretas, tal como siempre lo ha hecho y opinó de varias polémicas, incluidas las que ella misma ha protagonizado.
"Estoy bien, agradecida de esta etapa de mi vida, que ha sido muy intensa, pero también llena de aprendizajes. Hoy estoy entre Miami y Chile (...) así la vida me lo fue presentando. A veces uno no planea ciertas cosas, pero llegan igual… y hay que saber recibirlas con apertura y fortaleza", partió diciendo para definir la etapa que está atravesando.
Asegura que se está tomando un descanso tras varios meses de exposición, pero que no pretende desaparecer del medio. Esta aparente calma es más bien una instancia para tomar fuerzas y volver recargada: "Por ahora estoy abierta a lo que la vida me siga mostrando. Estoy en un proceso de transición, con el corazón en ambos lugares. No tengo planes rígidos, prefiero fluir, estar atenta a las oportunidades y tomar decisiones con calma, desde lo que me haga bien. A veces uno no necesita tener todo claro, solo estar disponible para lo que viene", reflexionó.
La joven modelo que llegó para quedarse
Cuando era joven, Claudia tenía el sueño de triunfar en las pasarelas chilenas, porque en Uruguay el mercado era mucho más pequeño. Claramente logró su objetivo, porque la chica oriunda de Pocitos terminó siendo más que conocida en el mundo de la moda chilena y fue parte fundamental de varios programas que ella recuerda con cariño, sobre todo porque conoció a muchos personajes en el camino que comenzó a recorrer hace más de 30 años.
"Toda experiencia en televisión me dejó algo, incluso las más desafiantes. Pero sin duda uno de los programas que recuerdo con más cariño es 'Pase lo que Pase'. Era un programa muy divertido, con una energía liviana y cercana. Trabajé con Felipe, Daniel, Karen y un equipo increíble, todos enfocados en entretener las tardes familiares. Me sentía feliz, libre y parte de algo bonito. Fue una época luminosa", recuerda la rubia.
- Te hiciste conocida como modelo, pero ¿pensaste que llegarías a desarrollar una carrera en la tele?
- Siempre sentí un amor profundo por la alta costura, por la estética, por el trabajo bien hecho en el mundo de la moda. Jamás fue un propósito llegar a la televisión; simplemente se dio. Y creo que supe aprovechar cada oportunidad que me fue dando la vida. Lo más difícil de esa etapa fue quizás lidiar con ciertos prejuicios o estereotipos, pero con el tiempo uno aprende.
- ¿No querías que te recordaran solo como la chica sexy de la tele?
- Sinceramente, me da igual cómo me recuerden. Yo lo pasé espectacular en ese tiempo y disfruté cada momento. No vivo de cómo me vean los otros, así que más que preocuparme por eso, prefiero quedarme con todo lo bueno de esos años.
- ¿Y qué fue lo mejor de esos años y también lo más difícil?
- Tengo recuerdos muy valiosos de "Morandé con compañía". Fue una vitrina enorme, un espacio que me permitió mostrarme y aprender muchísimo. Lo mejor fue la conexión con el público y el cariño que recibíamos semana a semana. Lo más difícil quizás fue enfrentar ciertas críticas que a veces venían con dureza o desde el prejuicio. Pero justamente eso me fortaleció y me enseñó que la autenticidad y la perseverancia son las únicas que realmente importan en este camino. Conocí a mucha gente a la que respeto y a la que puedo tener cariño, pero los amigos verdaderos se cuentan con una mano.
- ¿Sientes que la televisión es más cruel con las mujeres a medida que pasa el tiempo?, ¿crees que las oportunidades empezaron a disminuir a medida que ibas cumpliendo más edad?
- El paso del tiempo lo he vivido con naturalidad. He aprendido a valorarme más y a no exigirme tanto. La tele ha sido dura con las mujeres, y aunque algo ha cambiado, mientras sigan las mismas mafias y los mismos machos a cargo, será difícil que cambie del todo.
- ¿Crees que aún hay mucho machismo en la tele?
-Absolutamente, el machismo sigue muy presente, y no solo en lo que vemos en pantalla, sino en cómo se toman las decisiones desde arriba. Lo más grave es que la industria se ha empobrecido creativamente. Está tan cerrada y manejada por los mismos de siempre, que terminan poniendo al mismo animador en tres programas… y ahora también como productor ejecutivo. Eso no es visión, eso es monopolio disfrazado de costumbre. Si la televisión no se abre a nuevas voces, rostros y formas de contar, va a seguir perdiendo relevancia. El poder necesita renovarse para no volverse obsoleto.
"No tengo nada que perdonar”
Luego que Claudia Schmidt renunciara a Zona de Estrellas, de Zona Latina, tras haber peleado con Adriana Barrientos frente a las cámaras, muchos cibernautas la comenzaron a echar de menos, le pidieron que regresara, pero la uruguaya tenía su decisión tomada. Incluso, siguió apareciendo en otros programas del mismo canal como "Que te lo digo", pero ella nunca más retomó su rol de opinóloga con sus ex compañeros.
"Fue como cuando te vas de una fiesta justo antes de que empiece a ponerse fome. Me fui en el momento preciso. Pero volveré", sentenció cuando le preguntamos sobre su inesperada salida de dicho programa farandulero.
- ¿Crees que fue una decision acertada renunciar a Zona de Estrellas?
- Sí, fue una decisión que tomé desde el corazón y la convicción. En ese momento sentí que era lo mejor para mí, para cuidar mi energía y enfocarme en lo que realmente quiero. Siempre es difícil dejar algo que te gusta, pero a veces dar un paso al costado abre caminos nuevos y necesarios.
- ¿Hay algo de lo cual te arrepientas sobre lo ocurrido en ZDE?
- Los errores y aciertos forman parte del camino, y yo elijo aprender de todo sin cargar con arrepentimientos.
- Pero ¿perdonaste a la Adriana? ¿te ha llamado?
- No tengo nada que perdonar y nunca más hablamos. Le deseo lo mejor, cada quien sigue su camino y eso es lo más sano. Creo que todo pasa por algo y, aunque a veces uno piensa en el “qué hubiera sido si…”, hoy valoro cada paso que di. No cambiaría nada, porque cada experiencia me formó y me enseñó a ser quien soy ahora.
- ¿Qué te pareció la defensa que Pablo Candia te hizo en varios medios?
- Pablo fue muy generoso y solidario conmigo en un momento difícil. Valoro mucho a la gente que puede ser imparcial y decir lo que realmente piensa, más allá de si es amigo o no. Eso habla de convicción y coherencia, algo que no abunda.
Una opinóloga sincera
Desde su rol como opinóloga criticó sin filtro a varios personajes faranduleros, por eso no es de extrañar que llamara "inmadura" e "incoherente" a Daniela Aránguiz o le recordara a Cecilia Gutiérrez que "debe sacar su título de periodista".
Schmidt decía las cosas de frente y sin problemas, cayera quién cayera. Por eso mismo y aprovechando que su análisis farandulero es siempre al hueso, le consultamos cuál era su visión sobre las últimas polémicas en Chile, ya que tal como dice ella "ojo de loca no se equivoca".
- Si te dieran a elegir, ¿cual seria el panel perfecto de farándula para ti?
- Creo que el panel perfecto debe tener de todo: distintas edades, experiencia y nuevos rostros. Todos aportan desde su lugar, y esa mezcla es lo que hace que un espacio sea dinámico y real. Estamos armando ese panel perfecto, pero tranqui, que esto es solo un adelanto para cuando nos toque tomar el control… ¡queda mucho por venir!.
- ¿Qué te parece el papel de Marlen en Mundos Opuestos? ¿volverías a un reality?
- La verdad, no veo el reality, pero me divierte más el Mago que Marlen. En cuanto a volver, no lo descarto. Las puertas están entreabiertas… nunca se sabe cuándo decida entrar.
- ¿Qué te parece que Pancha Merino haya contado que cuando pololeaba con Luciano Cruz-Coke, la actriz Ingrid Cruz se metió en su relación y "se lo agarró"?
- Pelea de gladiadoras: una atacó primero y la otra respondió. En esta, banco a la Pancha.
- Dicen que vuelven las indomables, ¿te ha llamado Patricia Maldonado? ¿te gusta ese regreso?
- No me ha llamado, pero me parece divertidísimo que vuelvan. Siempre es un show verlas juntas: dicen lo que piensan, se ríen, pelean un poco… y eso a la gente le encanta. Si el cheque hace sonreír… podría ser. La farándula nunca muere, solo se reinventa y Las Indomables son prueba de eso: son talentosas, frontales y saben cómo encender la pantalla. A mí me encantan.
- Finalmente, ¿qué haces para verte tan estupenda?, ¿cómo te cuidas físicamente?
- La verdad, no me cuido. Voy contra la corriente. Cuando era raro ver a una mujer con un six pack y cuerpo fitness, yo ya lo tenía. Hoy, en cambio, pareciera que todas quieren verse iguales, ser una especie de muñeca producida en serie. Yo ya no persigo eso. Me gusta ser real, libre y no entrar en esa fábrica de moldes… donde muchas terminan sin identidad.




