Así fue el inolvidable paso de Salma Hayek en "Mi tío y yo" de Venga Conmigo

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En medio de su gran éxito en Hollywood, Salma Hayek sorprendió con una inesperada aparición en el recordado programa Venga Conmigo del 13.

Corría la segunda mitad de los 90’ cuando la actriz mexicana fue invitada especial en el sketch "Mi tío y yo", una de las secciones humorísticas más queridas del programa. 

En esa divertida escena compartió créditos con intérpretes nacionales: Gonzalo Robles, Cristián de la Fuente, Tatiana Molina y Teresita Reyes.

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Salma Hayek / Créditos: Instagram @salmahayek
Salma Hayek / Créditos: Instagram @salmahayek

El inolvidable paso de Salma Hayek por “Mí tío y yo”

La mexicana interpretó a una exigente directora de cine en busca de galanes para su próxima película. 

Mientras evaluaba a dos candidatos —uno de ellos apodado “el Antonio Banderas chileno”— la situación se volvía cada vez más hilarante. 

Desde escenas románticas improvisadas hasta besos fallidos y celos en escena, el sketch culminó con un giro: Salma Hayek no era la protagonista de la cinta, sino la directora, y la verdadera estrella era otra actriz.

Pero la anécdota no termina ahí: en esa visita a Chile, la actriz llegó junto al productor Jorge Insúa, quien se fijó en el talento de Cristián de la Fuente. Poco tiempo después, lo llevaría a EE.UU. para su primer papel internacional en la serie "Reyes y Rey", iniciando así su carrera en el extranjero.

El impacto de la visita de Salma Hayek

Hace unos años José Alfredo "Pollo" Fuentes contó en conversación con LUN lo importante que fue para el programa contar con la breve participación de la estrella de Hollywood.

"Fue un golazo tenerla en nuestro programa, porque estaba en uno de los peaks de su carrera. Estuvimos bastante rato con Salma. Fue muy amorosa, muy sencilla y cercana. Muy buena relación con los actores. ¿Diva? No, en lo absoluto", aseguró el animador de Venga Conmigo. 

Por su parte, Tatiana Molina confesó que Salma Hayek "era muy menudita, muy chiquita, simpática, encantadora y profundamente normal. En ningún momento nos hizo sentir diferencias porque ella era una estrella de Hollywood. Fue una grata sorpresa, una buena experiencia".

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