Maite Orsini se olvida del Congreso y sorprende con radical cambio de trabajo
La diputada comparte su experiencia con estudiantes y promueve la comprensión de los derechos en el espacio digital.
El año de Maite Orsini ha estado marcado por polémicas, tras su comentada relación con Jorge Valdivia, fuertes críticas de su sector político y los conflictos judiciales con Daniela Aránguiz. Sin embargo, esta semana se reveló un nuevo aspecto de su actividad, ya que estaría impartiendo clases en algunos establecimientos.
Alejada por un momento de su labor como diputada, la ex Calle 7 inició un ciclo de clases sobre violencia digital, que dictará en diversos colegios de la Región Metropolitana. Esta actividad se realizará por algunas semanas de manera gratuita y se enmarca dentro de su trabajo territorial como congresista.
Recientemente, Orsini se presentó en un colegio de la comuna de Lo Prado, donde expuso su charla frente a estudiantes de séptimo básico a cuarto medio.
“La política no es un título ni una oficina, es un compromiso que se puede vivir desde muchos lugares. Enseñar también es servir. El Congreso es un espacio de representación, pero la sala de clases es un espacio de encuentro”, señaló la diputada en su conversación con los alumnos.
“Expliqué qué significa y cuáles son sus formas: ciberacoso, ciberflashing, difusión de imágenes íntimas sin consentimiento, doxing, usurpación de identidad, deepfake. Mi idea fue que las y los alumnos comprendieran que internet no es un mundo aparte, sino una extensión de la vida social. Las agresiones ahí también hieren y dejan cicatrices”, agregó a La Cuarta.
La reflexión de Maite Orsini
La vida de la parlamentaria ha sido compleja en los últimos años, y ella misma compartió algunas reflexiones sobre esta nueva faceta. “La vocación de servicio no se acaba con un cargo. No voy a la reelección, pero eso no significa dejar de servir a la comunidad. Dar clases es una manera distinta de continuar ese compromiso, de transmitir lo aprendido y motivar a otros a involucrarse”, expresó.
“Espero que los estudiantes comprendan que tienen derechos en el espacio digital y que pueden ser protagonistas. No solo receptores de leyes, sino generadores de cambios”, concluyó.








