En este capítulo de Contra Viento y Marea conocemos a Catalina y César, una pareja que tiene los días contados para casarse, debido a una extraña enfermedad que dejó a Catalina sin voz hace cuatro meses y que ahora está a punto de llevarla a la silla de ruedas. 

 

Sin embargo, hace dos años, Catalina era una mujer completamente normal, pero tras una dura depresión, comenzó a sentir síntomas extraños; padecía de ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica), una enfermedad neurológica que provoca que los músculos de su cuerpo se debiliten y pierdan totalmente la movilidad.

 

Para los médicos este es sólo el comienzo de una enfermedad que cada día irá empeorando su salud: cada uno de sus músculos  se irá atrofiando hasta que ya no podrá moverse, quedará presa dentro de su propio cuerpo. una patología en donde los especialistas auguran una expectativa de vida que no superaría los cinco años.

 

Catalina y su conversación con Pancho

 

Durante este quinto episodio, Catalina conversó y abrió su corazón respecto a su difícil cuadro de salud con Pancho Saavedra. Allí le comunicó, a través de su tablet, cómo se siente al enfrentar este duro momento y también su ilusión por casarse con César.

 

“Yo no quería ser un estorbo, pero él se encarga todos los días de entregarme amor”, le confesó Catalina al animador, a lo que él le respondió que jamás volviera a referirse de esa forma a sí misma, pues toda su familia y en especial César: “Yo he hablado con César y él dice que no hay nada que lo haga más feliz en el mundo que estar a tu lado”, señaló Pancho.

 

Pero uno de los dolores más grandes para Catalina es la distancia que su hijo Luis ha tomado con ella. “El se arranca para no verme así”, le comentó la novia al animador. 

 

 

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