La ginecóloga María de los Ángeles Larraín explica cómo la perimenopausia transforma tanto el cerebro como el metabolismo femenino, y qué hábitos ayudan a enfrentarla.

La perimenopausia no es un mito. Esta es una etapa biológica que viven las mujeres entre los 40 y los 50 años y que puede durar casi una década. Durante ese periodo de tiempo se viven una gran cantidad de cambios que antes la medicina no los había abordado. En un nuevo episodio de "Mi Segundo Tiempo", la conductora Leonor Varela conversó con María de los Ángeles Larraín, ginecóloga especializada en el climaterio y la menopausia.

La especialista explicó cuáles son los cambios principales que viven las mujeres cuando llegan a la perimenopausia. "Cuando se da la perimenopausia puede partir 5 o hasta 10 años antes", comentó de forma inicial y aseguró que el cerebro en esa etapa vive grandes cambios como una "poda neuronal".

¿Cómo cambia el cuerpo en la perimenopausia?

"El cerebro cambia estructuralmente. No solamente en su funcionamiento, funcionalmente, por supuesto, cambia, pero cambia hasta su estructura.   Las circunvoluciones, estructuralmente, se modifica porque las conexiones también se modifican (...)", dijo la doctora María de los Ángeles Larraín en "Mi Segundo Tiempo".

Con base en lecturas que ha tenido en su especialidad, el cerebro de la mujer en la perimenopausia y menopausia "se está podando, ¿ya? Como las flores que cuando viene el invierno hay que podarlas para volver a florecer, exactamente lo mismo. Es una poda neuronal que hace que todas esas conexiones que nos llevaban como hacia afuera, cuando éramos jóvenes, a la actividad, hacia los demás, hacernos cargos, a los hijos, a los maridos, los trabajos, exactamente, se transforma y empieza a llevarnos hacia adentro", declaró. 

Pero la mente no es la única que vive cambios. El cuerpo completo también se modifica con esta nueva etapa en la vida de las mujeres. Uno de los principales cambios están ligados con el metabolismo, donde las hormonas cambian. "Los estrógenos que suben, que bajan, que suben, que bajan, pero finalmente termina disminuyendo la cantidad de hormonas que tenemos, hace que nuestro metabolismo cambie, que nuestro gasto energético disminuya tanto en reposo como en actividad", declaró la ginecóloga.

Para lidiar mejor con los cambios hormonales u tener un estilo de vida saludable, la especialista recomienda realizar ejercicio y mantener una buena alimentación. Una dieta nutritiva con "muchas fibras, todos los fermentados buenísimos, yogur, kéfir, chucrut, los probióticos también tienden a ayudar mucho, el plato repleto de vegetales, ojalá de todos los colores habidos y por haber", recomendó.