Manuel de Tezanos no olvida el profundo dolor de la pérdida de su hijo: "Su paso fue breve, pero tenía un propósito"
El periodista deportivo recordó el difícil momento que vivió tras la muerte de Juan en el año 2011.
Manuel de Tezanos abordó su vida personal con honestidad, reflexionando sobre su relación de pareja y el difícil proceso tras la pérdida de uno de sus hijos.
En conversación con Costa Magazine, el periodista deportivo compartió detalles de su presente familiar: “La llegada de José Pedro (3) e Inés (1) ha sido espectacular. Ha sido un desafío, claro, porque son muy chicos y el tema de los horarios es complicado”.
“Piensa que yo trabajo casi todos los fines de semana, así que la que ha aperrado con todo es la Cami. Es una súper mamá, la banca con todo… realmente una compañera increíble”, expresó con admiración hacia su esposa.
Más adelante, relató una anécdota ocurrida en 2018, que marcó el inicio de su actual relación sentimental.
“Hay algo bien loco. En un momento complicado de mi vida, me hice una carta astral. Me habían echado de TVN, había terminado una relación, andaba con mal genio y muy volátil en todos los sentidos”, recordó.
“Esa carta me dijo algo que en ese minuto sonaba imposible: que iba a aparecer una persona en mi vida, muy distinta a lo que yo imaginaba, con personalidad fuerte y parecida a mi mamá en lo maternal (...) también decía que iba a tener dos hijos. ¡Y así fue! Nos casamos hace cuatro años y hoy puedo decir que es el amor de mi vida. Estamos felices con José Pedro y la Inés. Es increíble cómo se dio todo”, relató, destacando cómo esa lectura astrológica anticipó su presente.
Te podría interesar: Trini Neira lanzó feroz indirecta en sus redes sociales a semanas de quiebre con hijo de Kanela: “La gente ya no tiene códigos”
El duelo más duro de Manuel de Tezanos
Además de José Pedro e Inés, Manuel es padre de Valentina (21 años) y de Juan, quien falleció a los tres años.
Respecto a esa dolorosa experiencia, confesó: “¡Es durísimo! Perder a un niño no tiene nombre… es algo profundamente antinatural. Yo era muy joven, tenía 32 años, y esto ocurrió en 2011”.
“La verdad, no hay cómo prepararse para algo así. Recuerdo las primeras veces que volví a trabajar después de su muerte, y estaba completamente desconectado. Me repetía a mí mismo: ‘no debería estar acá’, solo quería llorar”, compartió.
El trágico suceso coincidió con la cobertura de la Copa América 2011, momento en el que enfrentó un fuerte colapso emocional.
“En plena pega, un productor de Fox me encaró y me dijo: ‘Manuel, así como estás, no me sirves. Estás muy mal, y lo entiendo, pero o te vas con tu familia o trabajas, una de dos’. Esa conversación fue un punto de quiebre”, contó.
“Recuerdo que al día siguiente dejé los calmantes de golpe, porque no podía seguir así. Lloraba todo el día durante esa Copa América. Fue una etapa angustiante, muy dura. Es una herida que uno aprende a llevar, pero que nunca se cierra del todo”, añadió.
Una huella imborrable
Con emoción, Manuel de Tezanos aseguró que el dolor por la muerte de su hijo “no se supera. Uno simplemente aprende a vivir con el dolor. Es muy cliché decirlo, pero es así”.
“Creo que la historia de vida de Juancito, aunque breve, fue completa. Fue un alma que vino al mundo a entregar un mensaje, un ejemplo potente, y lo hizo en apenas 2 años y 9 meses”, dijo el periodista.
“Para mí, y para todos los que lo conocieron, fue y sigue siendo una inspiración. Todavía lo recordamos. Trato de entenderlo así: su paso por el mundo era breve, pero tenía un propósito, y lo cumplió”, añadió.
Finalmente, reflexionó: “Los niños que se van antes son especiales, y uno, pese al dolor, tiene la fortuna de haber aprendido de ellos”.