Hexafluoruro de uranio: el gas venenoso y radiactivo que podrían liberar los ataques de EEUU a Irán
Tras los bombardeos a Irán, se encienden las alarmas por el hexafluoruro de uranio, un gas clave en armas nucleares que podría agravar el conflicto.
La tensión entre Estados Unidos e Irán volvió a escalar luego de que el gobierno de Donald Trump pasara a la ofensiva y atacara tres plantas nucleares. El bombardeo no solo tendría efectos geopolíticos, sino que también medioambientales, donde el temor es la fuga de gas hexafluoruro de uranio.
Entre múltiples factores que encienden la alerta a propósito del conflicto, uno que llamó la atención es la posible afectación a instalaciones nucleares que contienen gas hexafluoruro de uranio, altamente tóxico y volátil, que es fundamental en el desarrollo de material nuclear, tanto con fines energéticos como militares.
Su presencia en las zonas atacadas ha encendido las alarmas por el riesgo de fugas, contaminación ambiental y la escalada del conflicto hacia dimensiones aún más peligrosas.
¿Qué es el gas hexafluoruro de uranio?
El gas hexafluoruro de uranio (UF6) es una forma química del uranio que se utiliza en los procesos de enriquecimiento nuclear.
En estado natural, el uranio contiene principalmente el isótopo U-238, que no sirve para fines bélicos o energéticos, por lo que debe ser enriquecido con U-235. Para lograrlo, el uranio se convierte primero en este gas, que luego es sometido a centrifugado para separar los isótopos.
Y preocupa porque, además de su papel en la industria nuclear, el UF6 es extremadamente reactivo con la humedad del aire, liberando gases corrosivos y radiactivos si hay una fuga.
Por eso, cualquier daño en los contenedores que lo almacenan representa un peligro serio tanto para las personas como para el medioambiente. Su mención en un contexto bélico como el actual no es menor, y genera preocupación en múltiples organismos internacionales.
"Un incidente químico realmente grave", pero solo en el área
Al respecto, desde el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) mostraron su preocupación.
Rafael Grossi, el director general, dijo que la escalada militar “aumenta la posibilidad de una liberación radiológica con graves consecuencias para las personas y el medio ambiente”.
En esa misma línea, el profesor Simon Middleburgh, un científico de materiales nucleares de la Universidad de Bangor, en Gales, señala que "si hubiera un incidente y las centrifugadoras liberaran el hexafluoruro de uranio, el gas contenido dentro de ellas, entonces sería un incidente químico realmente grave".
Aunque, según adelanta, "no tendrá un gran impacto ambiental más allá del área muy, muy local".








