¿Cómo reconocer si los huevos están frescos y en buen estado?
Ante el reciente aumento del contrabando de huevos desde Bolivia, es crucial saber cómo identificar si los que adquieres son seguros para el consumo.
Ante el aumento en el contrabando de huevos desde Bolivia, se ha vuelto más importante que nunca saber distinguir un producto de calidad. Consumir huevos que no cumplen con los estándares sanitarios puede representar un riesgo significativo para tu salud y la de tu familia.
Por eso, es fundamental conocer las características que te ayudarán a identificar si los huevos que adquieres son frescos, seguros y aptos para el consumo, especialmente en un contexto donde la procedencia de algunos es incierta.
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Según el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), solo en el primer semestre, ya se han incautado 1.017.000 huevos, una cifra que casi iguala el total de 1.338.000 huevos confiscados durante todo el 2024.
¿Cómo reconocer si los huevos están en mal estado?
Ante la preocupación por el contrabando, es esencial que sepas cómo reconocer si un huevo está fresco y en buen estado. Aquí te presentamos algunos métodos sencillos y efectivos:
La prueba del agua (o flotabilidad)
Este es uno de los métodos más populares y fiables. Necesitarás un recipiente hondo con agua fría:
- Huevo fresco
- Se hundirá rápidamente hasta el fondo y se mantendrá acostado de lado. Esto indica que la cámara de aire dentro del huevo es muy pequeña.
- Huevo de unos días
- Se hundirá, pero la punta más ancha se levantará un poco. Su cámara de aire es un poco más grande
- Huevo viejo (pero aún apto)
- Se hundirá, pero se mantendrá en posición vertical, apoyado sobre su extremo más delgado. La cámara de aire es más grande, pero el huevo todavía podría ser comestible (úsalo para cocciones donde se caliente bien).
- Huevo en mal estado
- Flotará en la superficie. Esto significa que la cámara de aire es muy grande y se ha acumulado demasiado gas en su interior, lo que es un signo de descomposición. ¡Deséchalo!
Prueba del olfato:
El olfato es tu mejor aliado. Si un huevo está en mal estado, lo sabrás por su olor característico, incluso antes de romperlo:
- Huevo fresco
- No tiene un olor perceptible o es muy sutil y neutro.
- Huevo en mal estado
- Desprende un olor sulfuroso muy fuerte y desagradable, similar a azufre o "huevo podrido". Si al romperlo notas este olor, descártalo inmediatamente.
Prueba visual y de la yema:
Una vez que rompes el huevo, también puedes evaluar su frescura:
- Huevo fresco
- La clara debe ser densa, gelatinosa y mantenerse unida alrededor de la yema. Tendrá poca clara líquida que se extienda.
- La yema debe ser redonda, elevada y firme, centrada en la clara.
- Huevo menos fresco
- La clara será más líquida y se extenderá más fácilmente en el plato.
- La yema puede ser más plana y romperse con facilidad.
- Huevo en mal estado
- La clara puede tener un color anormal (rosado, verde o con manchas).
- La yema puede estar descolorida o mezclada con la clara. Si ves cualquier anomalía de color o textura, no lo consumas.
Sonido del Cascabel
Toma el huevo y acércalo a tu oído, luego agítalo suavemente:
- Huevo fresco
- No debería escucharse ningún sonido o ser muy sutil. El contenido está denso y firme.
- Huevo viejo
- Si escuchas un chapoteo o un movimiento significativo del contenido, significa que hay más aire dentro y el contenido está más suelto. Si bien esto no siempre indica que esté malo, es una señal de que no es tan fresco.
Inspección del Cascarón
Aunque el cascarón no siempre es un indicador de frescura, sí lo es de integridad:
- Debe estar limpio, sin grietas ni fisuras. Las grietas pueden permitir la entrada de bacterias.
- Cualquier mancha de moho o suciedad excesiva es una señal de alerta.








