Las redes estallan por avistamiento de perros con pelaje azules en Chernóbil
A casi cuatro décadas del desastre nuclear, rescatistas hallaron tres perros con un tono azul brillante en su pelaje, desatando teorías sobre su origen.
Un nuevo misterio emerge desde el corazón de Chernóbil. A 38 años de la explosión que marcó la historia nuclear mundial, un grupo de voluntarios de la organización Dogs of Chernobyl, afiliada al Clean Futures Fund, registró imágenes de tres perros con un inusual pelaje azul. Las sorprendentes imágenes, grabadas en octubre, rápidamente se viralizaron en redes sociales, alcanzando más de 330 mil reproducciones y despertando el asombro de científicos y curiosos en todo el mundo, detalló el Daily Star.
En el video, se observa a un perro completamente cubierto por un tono azul metálico, caminando junto a otros animales de color normal. En otro fragmento, aparece un can de distinta raza con el mismo tipo de pigmentación. Un tercer ejemplar, también azul, fue visto días después en una zona cercana, lo que generó más interrogantes sobre el fenómeno.
Los voluntarios, que se encontraban realizando jornadas de esterilización, vacunación y alimentación de los cerca de 700 perros que viven en la zona de exclusión, describieron el suceso como “una experiencia muy particular”.
“Nos encontramos con tres perros completamente azules. No sabemos exactamente qué está ocurriendo”, explicó un portavoz del grupo. “Los residentes nos preguntaron por qué estaban así, ya que la semana pasada no tenían ese color. Creemos que pudieron haber estado en contacto con algún químico, pero estamos investigando.”
Entre la ciencia y la contaminación: las teorías de los perros azules
Hasta el momento, no se ha determinado la causa del cambio de color. Los expertos sospechan que los animales pudieron entrar en contacto con residuos industriales o químicos, posiblemente restos de materiales oxidados o pigmentos que aún permanecen en estructuras abandonadas desde la época soviética.
Sin embargo, pese al llamativo color de su pelaje, los rescatistas aseguran que los perros se ven activos, fuertes y sin síntomas de enfermedad. “Están enérgicos y comen bien, pero todavía no hemos podido atraparlos para hacerles análisis”, añadieron desde Dogs of Chernobyl.
El programa, iniciado en 2017, busca cuidar a los descendientes de los animales domésticos que fueron abandonados tras el accidente nuclear de 1986. Con el paso del tiempo, los perros se adaptaron a un entorno hostil, convirtiéndose en símbolo de resistencia en una de las zonas más contaminadas del planeta.
Los perros azules en un contexto marcado por nuevas tensiones
El hallazgo ocurre en medio de un clima de nuevas alertas en la central de Chernóbil, donde recientemente se declaró una emergencia temporal tras un ataque ruso que afectó el suministro eléctrico de la estructura que contiene los restos del reactor número cuatro. Aunque las autoridades ucranianas confirmaron que la situación está controlada, la zona sigue siendo considerada un punto vulnerable por los constantes bombardeos en la región.
Mientras tanto, el video de los “perros azules de Chernóbil” continúa generando debate entre internautas, científicos y ambientalistas. Algunos lo ven como una señal del impacto persistente de la contaminación en el ecosistema, mientras otros sugieren que se trata de una reacción química superficial sin mayores riesgos biológicos.
Sea cual sea la explicación, las imágenes reavivan el interés mundial por un territorio que, casi cuatro décadas después, sigue recordando las consecuencias del mayor desastre nuclear de la historia.










