En este capítulo de El Sultán, Mahidevran está contenta por el exilio de Hurrem, sobre todo porque esto significó que el Sultán esté mucho más cerca de ella, tal como era antes. Del otro lado, Ibrahim como Gran Visir decide que Ferhat fue degradado a gobernador y esta decisión tranquiliza a la Sultana, pero no conforma a muchos.

La mujer en cambio escribe una carta para su amado Suleimán donde le expresa todos sus sentimientos de agonía al estar separada de él y su hijo. Hurrem también vuelve a insistir en su inocencia y que todo se trata de una trampa en su contra.

Tras enterarse de la carta, Ibrahim llega al Palacio a visitar a Hurrem. Él le propone liberarla solo con la condición de que de ahora en adelante haga todo lo que él le ordene. A pesar del gran deseo que siente por reencontrarse con el Sultán y su hijo, con toda dignidad Hurrem rechaza la propuesta, insistiendo en que ella es inocente y en que se le han acusado de cosas que ella sabe muy bien que jamás ha hecho.

Si bien estaba convencida de su decisión, una profunda conversación con Hatice la hará cambiar de opinión.

Gülfem y el Sultán tienen una honesta conversación, donde la mujer le comparte todos los sentimientos que alguna vez llegó a experimentar por él. Además, le comenta cómo avanza el romance entre Hatice y Ibrahim, confesándole que siempre estuvo al tanto del amor que existía entre los dos.

Hatice está realmente preocupada por el bienestar del pequeño Mehmet, quien no ha dejado de llorar desde que fue alejado de su madre. Desesperada, la única opción que ve es llevarlo con Hurrem contra la voluntad de todos.

Sin informárselo a la sultana, Hatice lleva a Mehmet con su madre, provocando una profunda alegría tanto en el pequeño como en Hurrem quien anhelaba verlo. Cuando la Sultana se entera, enfurece y decide enfrentar a su hija. La noble intención de Hatice logra conmover a la sultana, quien decide no hacer de esto un problema mayor.

Vuelve a revivir este emocionante capítulo de El Sultán.

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