La chilena Macarena Pérez, finalista olímpica y referente del BMX Freestyle mundial, comparte su inspiradora historia de esfuerzo, miedos superados y sueños cumplidos sobre dos ruedas.

La chilena Macarena Pérez, pionera del BMX Freestyle en nuestro país y finalista olímpica, continúa consolidándose como una de las grandes referentes del deporte a nivel internacional.

Con esfuerzo, valentía y una visión que cambió la historia de esta disciplina, la ciclista nacional ha demostrado que los sueños se construyen pedaleando y venciendo miedos.

Macarena Pérez: “El BMX me dio la vida”

Recordando sus primeros saltos, Pérez confesó la mezcla de emociones que la llevaron a superar sus límites: “Mis primeros backflip… iba muerta de miedo. Te tiráis y así, de repente, muy con la mente fría, o apagáis el cerebro y decís como ‘ya, voy’. Y caí el truco, no sabéis cómo. Es como una mezcla de truco, velocidad, altura, estilo. El BMX me dio la vida”, relató la deportista chilena.

Aunque hoy es reconocida mundialmente, asegura que en sus inicios no imaginaba un camino profesional dentro del BMX: “Yo no crecí con un sueño olímpico, no crecí mirando a otras mujeres profesionales, porque no había una carrera femenina del BMX”, señaló.

Un factor clave en su trayectoria fue el apoyo incondicional de su madre, quien la motivó a dar el salto al extranjero. “El apoyo de mi mamá siempre fue lo que necesitaba para poder dar ese paso. Me convenció de viajar, de conocer cómo es el BMX en Estados Unidos, que es la escena más grande a nivel mundial”, recordó.

Ese impulso coincidió con un momento histórico: la entrada del BMX Freestyle a los Juegos Olímpicos.

De Tokio a París: un nuevo renacer

Pérez fue parte de Tokio 2020, los primeros Juegos Olímpicos con BMX Freestyle, pero admite que no estaba en su mejor momento:

“Había clasificado a Tokio, que fue uno de los eventos más importantes de mi vida, pero mental y físicamente no me sentía preparada”, explicó.

Sin embargo, en París vivió una experiencia distinta. Clasifiqué a París y se me llenó el alma de nuevo. Quiero seguir persiguiendo este sueño, seguir compitiendo, porque me sentí bien andando en bici”, dijo con emoción.

Hoy, Macarena Pérez se reconoce como parte de una generación que abrió puertas para las mujeres en el BMX. “La importancia de tener referentes, sobre todo femeninos, es enorme. Me da una sensación súper bonita de que fui parte de ese proceso que abrió puertas a niñas y niños en todo el mundo”, concluyó.

Descubre más de su historia en la serie documental "Mente Fría".