Pancha Merino acusó de abuso sexual a importante director de la TV chilena: "No lo dejé"
La actriz Francisca Merino relató el traumático episodio que vivió siendo menor de edad. Apuntó directamente a Sergio Reisenberg, histórico director de TV y del Festival de Viña en los 80, detallando el presunto tocamiento que sufrió durante una "entrevista de trabajo".
Una impactante y delicada revelación marcó el reciente programa Plan Perfecto, donde la actriz Pancha Merino rompió el silencio sobre una grave experiencia de presunto abuso sexual que habría sufrido en su juventud. Apuntando a una figura de alta relevancia histórica en la televisión chilena, Merino identificó al recordado director del Festival de Viña en la década de los 80, Sergio Reisenberg, como el responsable del traumático episodio ocurrido cuando ella era menor de edad. La acusación fue entregada por la actriz en el contexto de un debate sobre el machismo dentro de los sets de grabación.
El relato de la actriz detalla cómo el director, que conocía a su familia, le ofreció una oportunidad laboral que parecía ser su puerta de entrada al mundo de la televisión. La situación de presunto abuso se habría producido a solas en la oficina del director, momento en el que Merino sintió una "tensión" que escaló rápidamente a un grave tocamiento indebido. A pesar de la gravedad de los hechos, que la dejaron en estado de shock, la actriz no realizó una denuncia formal, aunque sí encaró la situación posteriormente.
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Todo comenzó cuando Francisca Merino, siendo una joven con aspiraciones de estudiar teatro, coincidió con Sergio Reisenberg durante una comida familiar. Reisenberg, quien en ese momento trabajaba en CHV (la antigua RTU) y era amigo de sus padres, se mostró interesado en sus planes.
Pancha Merino acusó de abuso sexual al director Sergio Reisenberg
Según rememoró la actriz, el director le comentó sobre una posible vacante. Poco después, la secretaria de Reisenberg se contactó con Pancha para agendar una entrevista de trabajo. Ella recordó que su madre la llevó a CHV, no sin antes advertirle sobre la necesidad de estudiar. Sin embargo, la joven actriz solo pensaba en la independencia que la oportunidad le brindaría: "Yo lo único que veía, mi sueldo que iba a tener y el departamento sola. Entonces, no, y dije ya no necesito estudiar, mamá cállate", relató sobre su entusiasmo.
La situación de tensión se produjo una vez que Francisca se encontró a solas con Sergio Reisenberg en su oficina. La actriz detalló que la conversación comenzó con el director hablándole sobre la imagen que debía tener un rostro televisivo: “Me siento a hablar con él, y él me empezó a contar, que uno como rostro tiene que ser querida para las mujeres, porque son las mujeres las que eligen. Y en eso me dice ‘mira, sentémonos mejor allá’, en el living”, detalló la actriz.
Fue en ese momento que Merino confesó haber sentido una extraña presión e incomodidad: “Ahí como que sentí una tensión. Y él se sienta al lado mío y me pone la mano entremedio de las piernas”, reveló Francisca, exponiendo el presunto tocamiento de Reisenberg que la dejó en shock.
Tras el traumático momento, la reacción de la joven fue la de tomar sus cosas y escapar inmediatamente de la oficina. "Yo no sé en qué minuto agarré mi cartera, y me fui. Quedé en shock. Llego al auto, que mi mamá me estaba esperando y me pongo a llorar”, recordó emocionada.
Merino detalló que, pese a la gravedad de los hechos, nunca realizó una denuncia formal contra Sergio Reisenberg. Sin embargo, sí mencionó que su madre, al enterarse, se contactó con el director para encararlo, especialmente considerando que se trataba de “la hija pequeña de unos amigos”. Finalmente, Pancha optó por seguir el consejo inicial de su madre: estudiar teatro para abrirse camino por sí sola.
"No lo dejé"
La actriz reveló que, a pesar de los años, su repudio hacia el director se mantuvo. "Yo nunca lo soporté”, confesó. De hecho, contó que Reisenberg incluso intentó acercarse a ella para hablar sobre la situación, a lo que ella se negó rotundamente, dando origen a la cita que enmarca la noticia: “No lo dejé. Quiso hablar conmigo y yo no lo dejé ni hablar”.
Pancha Merino cerró su relato con una dura reflexión sobre la vulnerabilidad que experimentó y la posición de poder del director: “Me conoció en una cosa familiar, además conocía a mi padre. O sea, imagínate a cuánta gente se lo habrá hecho, cuántas niñitas que no tienen redes”, sentenció, buscando visibilizar una situación que, según su testimonio, le tocó vivir en la puerta de su carrera profesional.