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María Luisa Godoy se sincera sobre el síndrome de su hijo menor: “Me dolió mucho sentir que lo vieran así”

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La animadora reflexionó sobre la inclusión, los prejuicios y el amor incondicional que ha transformado su forma de ver la vida.

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Hace poco más de tres años, María Luisa Godoy dio la bienvenida a su quinto hijo, Domingo, quien nació con síndrome de Down. Desde entonces, la animadora asegura que su visión de la vida cambió por completo.

En su más reciente entrevista en el podcast “Más Que Titulares” con Javiera Quiroga, la comunicadora habló con total honestidad sobre el diagnóstico de su pequeño y cómo ha vivido este proceso como madre.

“Yo siento que un niño con una condición puede ser una preocupación, pero no lo veo como un problema o una angustia, pero un hijo enfermo son palabras mayores. Y gracias a Dios hasta el momento Domingo nunca ha tenido una enfermedad”, comentó al inicio, refiriéndose al estado de salud de su hijo.

“No tuvo enfermedad del corazón, que es muy típica en el síndrome de Down, no tuvo tampoco el intestino, que es muy típico”, explicó, asegurando que “es un niño sano”.

La exanimadora del Festival de Viña del Mar señaló además que no hace diferencias entre sus hijos, destacando que todos reciben el mismo trato y cariño.

“No porque tuviera síndrome de Down yo lo sentí distinto a otro hijo. Yo lo trato, Domingo, igual que a cualquiera de mis hijos y es un motivo de mucha felicidad”, expresó.

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María Luisa Godoy y el duro camino que debe enfrentar Domingo

A pesar de la felicidad que su hijo le ha traído, María Luisa confesó que ha debido enfrentar realidades difíciles y prejuicios que la han impactado profundamente.

“Sí me entristeció mucho también saber cómo el porcentaje de abortos, no sé, en Inglaterra tú los puedes abortar hasta los nueve meses. Eso fue como una apuñalada que yo dije, ¿cómo puede ser el nivel de discriminación? Me dolió mucho sentir que a mi hijo lo vieran así. Y bueno, y me duele hasta el día de hoy”, comentó, visiblemente emocionada.

En esa línea, la animadora reconoció que este tipo de pensamientos la dejan helada y le provocan un profundo dolor.

“Me impacta porque es una mentalidad muy distinta a la mía y una manera de sentir muy diferente a la mía porque todos los hijos van a tener problemas en la vida, a todos nos pasan cosas y uno no está como diciendo ‘ah no, este me va a traer muchas preocupaciones, este no viene al mundo’ (…) es súper violento”, expuso.

Finalmente, María Luisa reflexionó sobre la importancia de la inclusión y de valorar a todas las personas por igual.

“Nadie tiene la vida ganada, o sea, un hijo sin una condición puede ser mucho más problemático que un hijo con síndrome de Down o tener otras cosas, o sea, en la vida pasan cosas. Y uno no quiere andar por la vida como cortándola porque fíjate que te ahorras problemas. Me duele por él que los vean de esa manera porque, digo, todavía queda tanto por avanzar en inclusión”, cerró.

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