El duro diagnóstico que enfrenta un integrante de Tomás va a Morir: "No tiene cura"
Durante la última emisión de un popular podcast nacional, uno de sus integrantes sorprendió al relatar que enfrenta una compleja condición cerebral sin cura.
Alejandro “Buffy” de La Cruz, integrante del popular podcast Tomás Va a Morir, sorprendió a los auditores al confesar que padece una enfermedad cerebral grave y sin cura. La revelación la realizó en el más reciente episodio del programa que conduce junto a Tomás Leiva y Edo Caroe, donde relató cómo fue el complejo proceso que lo llevó a recibir este diagnóstico.
El youtuber relata que todo comenzó mientras se encontraba de vacaciones en Estados Unidos. Una mañana, notó que su visión en el ojo izquierdo no se aclaraba después de despertarse, tal como suele ocurrir durante los primeros segundos del día.
La molestia persistió y, aunque veía con normalidad por el ojo derecho, en el izquierdo la visión estaba reducida a un 60%. Por desconocer cómo acceder a la atención médica en ese país, decidió esperar hasta regresar a Chile para consultar a un especialista.
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La compleja situación médica que acompleja a Buffy: Tomás va a Morir
Ya en Santiago, el escritor acudió a un oftalmólogo, quien tras realizar diversos exámenes confirmó que su visión estaba en perfectas condiciones. Sin embargo, el especialista advirtió que el problema no estaba en el ojo, sino en el cerebro, por lo que fue derivado a un neurooftalmólogo.
Este ordenó una resonancia cerebral y ocular con y sin contraste, cuyos resultados arrojaron un hallazgo complejo: daño en la mielina, sustancia que recubre las neuronas y permite la correcta transmisión de los impulsos eléctricos.
“Cuando la mielina se va, los impulsos empiezan a chisporrotear y no llegan al final. Literalmente, se pelan los cables”, explicó el también geógrafo en medio de la conversación en el podcast Tomás va a Morir.
Posteriormente, Barros fue evaluado por un neurólogo, quien tras revisar los resultados decidió hospitalizarlo en la Clínica UC Christus por tres días, con el fin de realizar nuevos procedimientos y descartar otras posibles enfermedades.
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Aunque evitó entregar públicamente el nombre exacto de su diagnóstico, reconoció que se trata de una condición irreversible y de alto impacto en su vida diaria.
“Lo voy a decir sin ningún tapujo más: tengo una enfermedad al cerebro que no tiene cura y voy a tener que vivir el resto de mi vida con eso. Es muy grave". Es una de las enfermedades graves que uno puede tener”, dijo con crudeza, aunque sin dejar de lado el humor característico del podcast.
Con todo, Barros destacó los avances médicos que permiten sobrellevar la enfermedad, comparando la situación con la evolución del tratamiento del VIH en las últimas décadas.
“Hace 20 años, la enfermedad que tengo te mataba. Hoy puedes vivir una vida difícil, pero vivirla (...) Quizás no llegue a los 90 años, pero sí a los 60. Tengo cinco o diez años para disfrutar de mi cuerpo físico, que después no voy a tener”, reflexionó Buffy.
