En este nuevo capítulo de Contra Viento y Marea, conocimos a Carina, una madre que lo da todo por su hija Dominga, quien sufre de una rara enfermedad autoinflamatoria. Momentos antes de casarse, Carina decide rezar a solas en la capilla, donde le pide a Dios por la salud de su pequeña.

“Si estoy aquí es para suplicarte, para implorarte que mi hija ya no sufra. Que esté bien, que pueda tener una vida normal, que pueda jugar tranquila, que pueda ir al colegio, que no llore de dolor”, ora la novia, preocupada por el futuro de Dominga.

Carina se emociona al relatar las dificultades que ella y su familia han vivido y el gran deseo que tiene por ver a su hija sana. Al verla arrodillada en su vestido blanco, su madre se acerca junto a Pancha a consolarla y recordarle que este es un día de celebración.

Enfermedad misteriosa

La hija de Carina sufre de una mutación genética única en el país, la que le causa fiebres, vómitos y erupciones en su piel. La rareza de esta condición ha dificultado mucho identificar exactamente cómo ayudar a Dominga: “La anhele tanto, ahora la veo sufrir y se me rompe el corazón. Te pido ese diagnóstico, este tratamiento”, reza Carina.

Al comienzo de este capítulo, la novia le comenta a Pancho Saavedra su esperanza de que Dominga crezca y pueda sanarse de su enfermedad, demostrando lo importante que es para ella la salud de su hija. “Si a ella le pasa algo yo me muero… estoy haciendo todo. Cuando la veo sufrir pienso que me abandonaste”, le dice a Dios Carina en la iglesia. 

Conoce la historia completa de Carina y Dominga en el tercer capítulo de la temporada de Contra Viento y Marea.

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