Vuelco en el caso de trabajador torturado en Hospital de Osorno: Padre de la víctima reveló importante antecedente sobre su hijo
La versión de la familia del extrabajador, cuyo caso de tortura ha conmocionado al país, contradice la información difundida por el Servicio de Salud de Osorno y la Fiscalía. Según el padre de la víctima, su hijo no padece Trastorno del Espectro Autista (TEA), lo que abre un nuevo capítulo en la investigación y genera interrogantes sobre los antecedentes del caso.
La indignación en el país ha alcanzado un nuevo nivel tras el brutal caso de tortura sufrido por un trabajador en el Hospital Base de Osorno. Mientras tres de los cuatro implicados han sido detenidos y se preparan para su formalización judicial, un giro inesperado ha sacudido el caso.
El padre de la víctima, en una declaración que contradice la versión oficial difundida por la Fiscalía y el Servicio de Salud, asegura que su hijo no padece Trastorno del Espectro Autista (TEA), un diagnóstico que había sido un factor central en el repudio social.
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En conversación con Radio ADN, Juan, papá del hombre agredido, compartió detalles desgarradores de los hechos que habrían ocurrido hace tres años. Relató que su hijo le ocultó la verdadera magnitud de las agresiones por temor a su reacción, revelándole solo parte de la violencia que enfrentaba. "Me contó que lo habían golpeado, entre varios lo amarraron", afirmó, sin saber que los tormentos incluían quemaduras con gas, rapaduras y torturas.
Padre de extrabajador torturado en Hospital de Osorno asegura que su hijo no tiene TEA
El padre del extrabajador torturado en el Hospital de Osorno ha desmentido la información clave que circuló en el caso. "Lo pusieron en el medio de comunicación (que publicó la historia) para ocultar su identidad", aseguró el hombre al referirse al supuesto diagnóstico de Trastorno del Espectro Autista (TEA) de su hijo, una condición que, según él, no padece.
La víctima había abandonado el hospital después de denunciar la brutalidad sufrida, una decisión que su padre respaldó debido a la peligrosidad del ambiente laboral.
A pesar de la demora en la investigación, la familia confía en que la justicia actuará. "Esto fue tortura, y no prescribe antes de diez años", sentenció el padre, subrayando la gravedad de los crímenes. Su principal deseo es que este caso siente un precedente para que ninguna otra persona, en el ámbito público o privado, deba enfrentar una situación similar.
Adicionalmente, se confirmó este viernes que el cuarto funcionario acusado de las agresiones se entregó ante el tribunal. Con esta acción, los cuatro involucrados en la tortura ya se encuentran bajo custodia, a la espera de su formalización.
