A 30 kilómetros al interior de Vicuña se encuentra Chapilca, una localidad rural donde un grupo de mujeres decidieron aprender el ancestral oficio de tejer. Ahí, conocimos a Macarena Urrutia, presidenta del Centro Cultural Chapilca, espacio creado para el servicio de la comunidad. Además, Pancho aprendió el ancestral oficio de hilar la lana de una oveja, material que luego se utiliza para tejer.

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