La mujer llevó al supuesto erizo a un veterinario, donde descubrieron que en realidad no era un animal de ningún tipo.

Una mujer inglesa cuidó durante toda la noche lo que creía que era un erizo bebé, solo para descubrir luego que se trataba del pompón de un gorro. 

La mujer encontró al supuesto animal durante la noche en Knutsford, Cheshire, lo recogió y lo llevó a su casa, pensando que se encontraba herido. 

A la mañana siguiente lo llevó hasta un centro veterinario en una caja con papel de diario y un poco de comida junto a él. 

Cuando la veterinaria Janet Kotze abrió la caja se dio cuenta de que en realidad no se trataba de un erizo como la mujer pensaba, sino que de un pompón de un gorro. 

"Era la primera admisión del día. La señora entró con una caja, dijo que había encontrado un erizo bebé en la acera, que hacía frío y que lo recogió", afirmó Kotze a Daily Mail. 

"Me alarmé porque es muy temprano para las crías de erizo. Abrí la caja y, bueno, no podía creer lo que estaba viendo. Pensé definitivamente no era un erizo, tal vez algún otro tipo de criatura peluda", recordó la mujer. 

"Me di cuenta de que no tenía nada de vida, lo levanté y obviamente con el peso pude sentir que no era un erizo ni ningún animal en absoluto", continuó. 

La avergonzada mujer le quitó la caja de las manos y rápidamente se fue del lugar. "Ella era muy dulce, bendita sea, su corazón estaba en el lugar correcto", añadió.

 "Es una regla de oro que los erizos no deberían estar afuera durante el día, especialmente los más pequeños, así que ella hizo absolutamente lo correcto, aparte del hecho de que no era un erizo", bromeó.

 

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