Cassandra le cuenta a Rebeca la noticia de la que todo el mundo habla: Mercedes fue la mujer que pasó la noche con Vicente antes de morir.

La Martuca se niega rotundamente a que sus hijos Jason y Byron se casen y hagan la fiesta en la mansión. Aunque intentan convencerla, la matriarca de los Sa-sá no piensa echar pié atrás, sobre todo porque Byron es menor de edad.

Mercedes está desesperada de que sus secretos se difundan. Una vez que Humberto llega a la casa, le pide llorando que le diga en dónde había estado. Humberto le confiesa que fue donde Rebeca a contarle toda la verdad, lo que termina por destruir a Mercedes. Debido a lo anterior, toma la decisión de armas sus maletas e irse de esa casa para siempre.

Beatriz discute nuevamente con Dante por la responsabilidad de Mercedes en la muerte de Vicente. Lo culpa de haber preferido defender a su madre antes que contarle que ella había estado con Vicente en el hotel la noche en que murió. Incluso le confiesa que fue su enemiga Cassandra la que le contó todo. La discusión sube de nivel con el paso de los minutos, al punto que Dante tiene que salir arrancando ante la furia de Beatriz.

Humberto intenta retener a Mercedes para que no se vaya de la casa, pero ella hace oídos sordos. Justo cuando abre la puerta para salir, aparece Rebeca en la entrada y con rabia la toma del brazo para increparla. Le dice que sabe toda la verdad sobre la muerte de Vicente. Es en ese momento en el Humberto recién se entera del otro secreto que escondía Mercedes, reaccionando muy mal ante esta noticia.

Cassandra se encarga de seguir esparciendo la información de que Mercedes mató a Vicente. Esta vez es el turno del resto de las profesionales del servicio, las que reaccionan sorprendidas ante lo que les cuenta la rubia. De pronto aparece Beatriz, oportunidad que Cassandra aprovecha para decirle que nunca más se dejará humillar por ella.

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