Desierto de Atacama lidera la transición a energía renovable con un parque solar
Con 300 hectáreas de paneles solares en el desierto de Atacama, Pacific Hydro lidera la transición energética en Chile. Desde 2002, sus proyectos han mitigado más de 5 millones de toneladas de CO₂.
En medio del desierto de Atacama, una de las zonas con mayor radiación solar del planeta, Chile lidera un ambicioso proceso de transformación energética.
Durante un nuevo episodio del programa de 13 C, Megaproyectos, el ingeniero Matías Egaña nos presentó el trabajo que se realiza en el norte del país para reducir la dependencia de combustibles fósiles, responsables de gran parte de la emisión de gases del efecto invernadero.
El megaproyecto que protagonizó el más reciente capítulo del espacio es el nuevo parque solar de Pacific Hydro, ubicado en la localidad de Los Loros, comuna de Tierra Amarilla, en la región de Atacama. Con una inversión de 300 millones de dólares y una capacidad de 280 MW de potencia, esta planta no solo representa el proyecto más grande de la empresa en operación, sino que también refuerza la idea de una energía que se genere de forma limpia, tenga almacenamiento eficiente y una transmisión segura.
Un parque solar en el desierto de Atacama: Conoce el megaproyecto que impulsa la energía renovable en Chile
Desde su llegada a Chile en 2002, la empresa Pacific Hydro ha apostado por el desarrollo de proyectos 100% renovables en las regiones de Atacama, Coquimbo y O’Higgins. En el norte del país, en el sector de Tierra Amarilla, la planta solar está compuesta por 64 plantas generadoras de energía, 45 de ellas basadas en fuentes renovables, lo que representa un 73% de la matriz energética regional.
Con más de 1.200 trabajadores involucrados en su construcción, el proyecto destaca por la precisión técnica que exige operar en condiciones extremas: suelos duros, variaciones térmicas de más de 40 °C, y vientos superiores a 80 km/h.
La planta genera una potencia de 280 megavatios y aprovecha los paneles solares fotovoltaicos que convierten la luz solar directamente en electricidad. Esta energía producida es almacenada y transformada en corriente alterna mediante sistemas avanzados de conversión y almacenamiento, y asegura una integración eficiente y estable al sistema eléctrico nacional.

