Más coreanos en la LLA, ¿realmente los necesitamos?

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A principio del 2019 el nuevo equipo de la liga, All Knights, nos sorprendió con la inclusión de 3 coreanos en sus filas, para el segundo split, ya eran 3 los equipos que incluyeron jugadores orientales a sus escuadras. 

Recientemente, ese número aumentó a 4 con un Furious Gaming que despidió a Manu, su tirador de Puerto Rico, y en su lugar puso a Younghoon "BVOY" Joo como tirador titular. Con esta inclusión, oficialmente la mitad de los equipos de la Liga Latinoamérica tiene coreanos en sus equipos, quienes han enfrentado la barrera idiomática, clima, cultura y tradiciones distintas a las de su país natal con un mismo objetivo: aprovechar que son mejores para ganar todo. 

 

 


 

 

Pero, ¿por qué un jugador coreano, entre todas las regiones del mundo, elegiría la LLA como destino? No, no son fanáticos de las arepas ni las empanadas, son jugadores que tienen como objetivo, en su mayoría, llegar al mundial. En comparación a otras ligas, ganar el split y llegar a Worlds parece más fácil aquí que en Corea u otras regiones, por lo que todos estos jugadores que tienen como meta mostrar su forma de juego en la mayor tribuna competitiva del mundo, ven una gran oportunidad en nuestra liga que, aunque tiene que pasar por play-ins, tiene un cupo en la competencia. 

¿El problema? Muchos jugadores no han demostrado el asombroso e irreal nivel de juego que esperábamos de esa región. All Knights ha sido el primero en decirle adiós a uno de estos jugadores, Hoglet, que en sus últimas partidas del split se mostró más débil que jugadores de origen latinoamericano, cayendo ante Oddie en la Semifinal. Otro gran ejemplo es Kaos Latin Gamers, quienes apostaron por dos jugadores del país asiático y han conseguido solo una victoria y 6 derrotas en este split. 

Nuevos jugadores traen nuevos desafíos y la barrera idiomática, las mentalidades distintas y los estilos de juego variados han sido obstáculos para los equipos que decidieron traer talento extranjero a su alineación, pero en el mejor de los casos, valorar, aprender y aprovechar esas diferencias nos ayudará a tener una región con mayor nivel y tal vez, si le rezamos a nuestros dioses latinoamericanos y a los coreanos, consigamos un mejor desempeño en instancias internacionales. Solo nos queda esperar a Worlds (y ver si algún equipo con coreanos llega a esa instancia).

 
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